03 febrero 2008

Visita del Padre Provincial de la Orden de los Carmelitas Descalzos de Andalucía

En la noche del pasado 24 de enero, la junta directiva de la Cofradía de la Buena Muerte celebró su reunión mensual con un punto del día principal, que era la visita que giró a nuestra Casa de Hermandad el Superior de la Provincia de Andalucía de la Orden de los Carmelitas Descalzos.

Desde hacía tiempo, nos había transmitido su deseo de conocer personalmente a los miembros de la junta directiva de la Cofradía y compartir nuestras inquietudes. Aprovechando la visita que ha realizado al Convento de los Carmelitas en nuestra ciudad pudimos concretar la cita que teníamos pendiente.

El Superior acompañado por nuestro Director Espiritual, el padre José Valero y por nuestro Hermano Mayor llegó a la Casa, donde fueron recibidos por miembros de la Junta. El orden del día de la reunión incluía algunos de los asuntos corrientes de la cofradía que fueron solventados rápidamente.

Así, el Hermano Mayor agradeció sinceramente al Provincial su deseo de reunirse con nosotros y su visita. El Padre Provincial nos demostró su gran conocimiento de las actividades de la Cofradía y del trabajo realizado por la misma, así como de su idiosincrasia y su manera de actuar. Nos comentó la devoción que hay al Cristo de la Buena Muerte dentro de la Casa de Úbeda, puesto que él mismo y muchos de los novicios, durante su noviciado en nuestra ciudad le rezaban asiduamente. De hecho, tiene el deseo de poder compartir un año con nosotros la procesión de nuestro titular por la calles de Úbeda, a lo que accedimos inmediatamente invitándole para cuando sus obligaciones se lo permitan.

Fue una reunión extremadamente cordial, en la que tanto por parte del Padre Provincial como por parte de la propia Cofradía, se esbozaron unas líneas de actuación futuras que estrecharan aún más si cabe los lazos de unión de la Cofradía con la Orden de los Carmelitas Descalzos.

La Cofradía le hizo entrega a él y a nuestro Director Espiritual, de la medalla de la Cofradía así como una reproducción de la cruz de la Cofradía para tenerla sobre la mesa de su despacho.